No formo parte de ningún gran bufete, ni estoy integrada en ningún organismo internacional de la Abogacía. Mis servicios se dirigen a las personas que necesitan un abogado que defienda sus intereses de forma personalizada y eficaz, pero a un coste razonable.          

El factor principal para contratar los servicios de un abogado es la confianza. Confianza tanto en su pericia profesional como en su honestidad. Ambas facetas son esenciales para ofrecer un servicio de calidad, y se van consolidando con los años de experiencia. 

     Y aunque actuaciones aisladas de algunos profesionales han propiciado una mala imagen de los abogados, por suerte, son una anómala excepción.

     Por mi larga experiencia como abogada defensora de los derechos de los consumidores y usuarios a través de entidades públicas y privadas, los principios en los que baso mi relación con los clientes son:

1.- Transparencia

       * En el precio

El cliente antes de contratar un servicio concreto y específico conoce el coste y recibe un presupuesto previo por escrito.  

      *En la información

El cliente, antes de contratar, conoce las posibilidades de éxito de su pretensión y del resultado previsible del asunto.

     Mientras se resuelve su procedimiento judicial, el cliente está al corriente de su evolución y obtiene copia de las resoluciones judiciales relevantes que se dicten.

2.- Honestidad

      *En la propuesta de la mejor opción

El cliente es informado de las mejores opciones a su caso, y de las distintas soluciones alternativas a la vía judicial para resolver el conflicto de la forma más conveniente a sus intereses.

      *En la aceptación del caso

Cuando desde el punto de vista jurídico se considere que un asunto es inviable y que la solicitud del servicio solicitado por el cliente es claramente perjudicial para sus intereses, el despacho se reserva el derecho de rechazar el servicio solicitado.

3.- Personalización

El cliente recibe un trato personalizado en atención a sus circunstancias personales por parte de la propia abogada que le llevará el asunto, sin intermediarios desconocidos por el cliente, y sin que los servicios contratados sean delegados en otros profesionales sin la aceptación previa del cliente. 

4.- Disponibilidad

El cliente puede comunicarse fluidamente con la Abogada ante cualquier duda o cuestión que le surja en relación con su caso, siendo atendida su consulta a la mayor brevedad.

5.- Rapidez

El cliente es atendido sin demora, procurando que la resolución de su caso sea resuelto con rapidez y eficacia.

6.- Flexibilidad

     *En el pago

El pago de los servicios puede fraccionarse en varios plazos.

      *En el horario

El cliente puede acordar sus citas de mañana o tarde en atención a sus circunstancias laborales o familiares.